Isla de los conejos

Se trata de la isla Okunoshima, en Japón, donde estas adorables criaturas se pueden encontrar por montones. Se debe tener cuidado al caminar, porque los conejos saben que los turistas siempre les llevan algo de comer y ellos aman las golosinas. No se tienen ningún dato en concreto de por qué razón la isla fue invadida por estos animales. Algunos investigadores afirman que en 1971, un grupo de escolares soltaron a 8 conejos y luego se reprodujeron rápidamente. Otra teoría es que son conejos de laboratorio liberados después de la segunda contienda mundial. Lo cierto es que estos animales viven ahora muy felices, porque no tienen ningún depredador natural y día a día la población sigue creciendo.

Isla de las tortugas gigantes

Estos hermosos animales habitan la isla periférica de Seychelles en el Océano Índico. El lugar es el hogar de al menos 150 mil ejemplares de tortugas gigantes. En 1982, la isla fue declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco. Las tortugas se pasean tranquilamente por la arena y la flora única, que no han sido alteradas por el hombre. Estos animales son muy bien cuidados por algunos vigilantes dedicados a su conservación. Para visitar la isla, se debe adquirir un permiso especial de la Fundación de las Islas Seychelles. Las tortugas son frecuentadas principalmente por científicos, naturalistas y algunos turistas.

Isla de los caballos

Se trata de la isla Assateague, en la costa oriental de Virginia y Maryland en Estados Unidos. Habitada únicamente por casi un millar de hermosos caballos de todos los colores. La isla también posee playas vírgenes de inconmensurable belleza. Por tratarse de caballos que se han vuelto salvajes, los turistas deben observarlos desde una distancia segura, pero hay algunos equinos más amigables que se acercan a las personas. Hasta la fecha, nadie sabe con certeza cómo llegaron a vivir allí.

Isla de los pingüinos

Existen muchas islas alrededor del mundo habitadas únicamente por pingüinos, pero la especie que vive en Argentina es bastante exótica. La isla se encuentra al sudeste de Puerto Deseado, en las costas de  Santa Cruz. Fue declarada Parque Marino, por su gran biodiversidad. El lugar se halla habitado únicamente por una colonia masiva de pingüinos de penacho amarillo, pero en sus aguas también se pueden encontrar lobos marinos y uno que otro elefante marino. Los turistas siempre son acompañados por guías para proteger a los pingüinos.

Isla de los cerdos

Estos animales a pesar de llevar una vida salvaje, son bastante amistosos. La isla, que es su hogar, se encuentra situada en el distrito de Exuma en las Bahamas. Los cerditos se la pasan nadando en las aguas cristalinas de la playa y comiendo manzanas. Cuenta la historia que estos animales llegaron a la isla gracias a unos piratas, quienes dejaron a un grupo de cerdos en el territorio para comérselos al regresar de su viaje, pero jamás volvieron. Actualmente, el único peligro para estos animales son los turistas quienes les dan alcohol y los obligan a realizar poses para sus selfies.

Isla de los gatos

Visitar esta isla es el sueño para cualquier amante de los felinos. La famosa isla Aoshima se sitúa al sur de Japón. Miles de turistas de todas partes del mundo arriban aquí cada año. Los gatos llegaron a la isla porque hubo una plaga de ratas, tanto en tierra como en los barcos pesqueros. Este hecho trajo a muchos gatos que empezaron a vivir allí y a reproducirse rápidamente. La isla en este momento está habitada por 20 personas, que tratan de cuidar a cientos de estos mininos. Si se va como turista, es muy recomendable llevarles algo de alimento.

Isla de las iguanas

Se trata de la isla Fernandina, en los Galápagos, Ecuador. Todo el archipiélago es una gran reserva natural. La isla volcánica está desprovista de humanos, por tal razón reinan las iguanas marinas y las iguanas terrestres. Para los amantes de los reptiles, éste es un lugar ideal. Se pueden encontrar en toda la isla tomando el sol sobre las piedras. Las iguanas más grandes, llamadas Godzilla, pueden medir hasta un metro de largo. Los turistas llegan en excursiones desde puerto Ayora, de la isla vecina Isabela.

Isla de los Micos

La isla Arara pertenece a la Amazonia Colombiana, a 20 kilómetros de Leticia. En ella se pueden apreciar a miles de micos, en su mayoría monos ardilla. Estos amistosos animalitos están acostumbrados a los turistas, por lo que se suben en sus cabezas y hombros, para que les tomen fotografías y les regalen un banano. La experiencia es inolvidable.