Para el proceso de comprar casa desde el exterior en Colombia hay varias opciones de financiaciónque facilitan la compra del inmueble dependiendo de la situación económica en la que se encuentre el comprador.
Una de estas opciones es acceder a un crédito hipotecario, pero ¿sabemos todo acerca de estos procesos financieros? Los créditos son dinero que las entidades financieras otorgan a sus clientes con el compromiso de que en el futuro éstos devuelvan dicho préstamo a través del pago de cuotas o en un solo pago, más los intereses y los cobros adicionales (seguros).
A partir de esta definición, podemos encontrar varias particularidades que corresponden al momento de solicitar el crédito, entre ellas, el pago del interés que es el valor que asume el comprador por el derecho a adquirir el dinero de forma inmediata a través de una entidad financiera.
En el caso de los créditos hipotecarios en Colombia o créditos de vivienda, se conocen como un préstamo a mediano o largo plazo que se otorga para la compra, ampliación, reparación o construcción de una vivienda. El crédito hipotecario también aplica para la compra de sitios, oficinas o locales comerciales. En ese sentido, cuando se realiza este tipo de trámite para la compra de un inmueble la propiedad adquirida queda en garantía o es -hipotecada- a favor de la entidad financiera para asegurar el cumplimiento del crédito.
Sin embargo, no solo depende del avalúo que se le dé al inmueble sino también del análisis financiero o capacidad de endeudamiento con la que cuente la persona en ese momento, ya que esto, también representa un requisito importante para la aprobación misma del préstamo.
Para ello, se debe estar seguro de cada uno de los aspectos financieros de la vida del comprador, ya que, el atraso en una de las cuotas, representa el incremento de la mora con el banco y esto a largo plazo, puede aumentar significativamente la suma total del pago del inmueble. Así mismo, en el caso de que se quiera vender esta propiedad hipotecada, se tendrá que primero pagar toda la deuda total con el banco y así quedaría liberada del todo, de lo contrario, no existe la posibilidad de que sea nuevamente vendida. Este gasto representa uno, la ampliación del plazo de finalización de las cuotas y, además, una pérdida de inversión mayor a la que hizo inicialmente.
Tenga en cuenta que este tipo de créditos, cuentan con unos seguros específicos que cubren varios aspectos importantes, entre ellos, muerte del titular, invalidez por accidente, pérdida de Empleo (por algunos meses), entre otros, sin embargo, asegúrese que consultar esto con su entidad aliada o con su asesor comercial con el que esté haciendo este proceso de compra.
A pesar de que tienen algunas especificaciones sobre el uso de estos seguros, una de las posibilidades, es que se pueda usar el seguro ante un desastre natural, incendio o terremoto, en este caso, se puede incluso pedir el desembolso del dinero total del avalúo del predio y con este, hacer una reconstrucción del inmueble.
Para ello se debe actualizar con el banco, el valor asegurado en su crédito hipotecario, que, si bien le generará un incremento en la cuota mensual, en caso de ocurrir un evento la indemnización que recibirá permitirá reconstruir o comprar una nueva vivienda.
Recuerde que, para iniciar el proceso de trámite para su préstamo, y como ya lo nombramos, debe revisar todas sus finanzas, teniendo en cuenta el porcentaje inicial que debe cubrir, como primer requisito para el desembolso del crédito total. Esta cuota inicial, para Vivienda de Interés Social (VIS) se solicita una cuota mínima del 20% del valor total del predio, y si es no es una Vivienda de Interés Social, se pide un mínimo del 30% del valor total de la casa. Este aporte es una parte crucial dentro de la transacción debido a que esto demuestra que tiene el patrimonio propio, capacidad y voluntad de ahorro para mantener correctamente la vivienda.
También y a parte de estos gastos fijados por los bancos, el comprador debe pensar en el papeleo y la gestión administrativa que requiere durante el proceso de la compra. En este caso, se debe tener un capital adicional con el que se cubrirán gastos correspondientes a certificados, escrituras y la posterior mudanza.
Finalmente, es importante destacar que existen dos formas de financiar un crédito hipotecario: en pesos o en UVR (Unidad de Valor Real), pero, ¿cuál es la diferencia?
Si el crédito es pactado en UVR, el valor de la cuota y el saldo del crédito pueden aumentar o disminuir de acuerdo con el comportamiento de la inflación, pero jamás crecerán por encima de la variación de la inflación.
Por su parte, al pagar el crédito en pesos la cuota mensual conserva el mismo valor durante el plazo del crédito y el abono a capital es menor al principio del crédito y se incrementa con el paso del tiempo. Si desea recibir más información en Casa Propia, puede simular su próximo crédito hipotecario, consulte la página y conozca más acerca de este proceso.